¡Los colores de la serpiente están desordenados! ¿Quién puede ayudar a ponerlos en orden? Rojo con rojo, azul con azul, amarillo con amarillo... ¡Es fácil! ¿verdad? Completad las serpientes con cabeza, cuerpo y cola y llevároslas a vuestro montón. ¡El que consiga más cartas al final de la partida es el ganador! Un sencillo y vistoso juego con asociación de colores, tipo dominó, para empezar con los juegos de reglas.
Objetivo
Todos los niños tienen que intentar formar serpientes, lo más largas posibles. Una serpiente siempre consta de tres partes: cabeza, cuerpo y cola. El niño que consiga más cartas gana el juego.
Descripción del juego
Un jugador al azar baraja todas las cartas y las coloca boca abajo en forma de abanico.
A continuación, saca una carta del abanico y la coloca boca arriba en el centro de la mesa.
Los niños van cogiendo por turnos una carta boca abajo desde la mesa e intentaran casarla con una parte de la serpiente ya en la mesa. La serpiente se puede prolongar si los colores casan. Cuando una serpiente tenga cabeza, cola y por lo menos una parte del cuerpo se considera completa y el jugador que la ha completado se la queda como puntos.
El juego termina cuando se acaba la baraja, el jugador con mas cartas gana la partida.